Como en las peores cadenas de televisión (creo que lo hacen en todas), llegado el verano es el momento de reposiciones. Cada cual se despereza como puede. Hace 23 años, siendo alumno de Enfermería, editábamos un fanzine llamado “La Cucagacha: Diario de Pedro Gotero”. Allí todo valía en cuanto a letras e imágenes, aunque con claro predominio de lo cutre. Hoy, 7 del 7 del 7, me permito rescatar un escrito. Muy manido ya, pero es lo que había por entonces. Ahí va levemente modificado:
La Magia del siete
En lo religioso, nadie dijo que habría de perdonar 490 veces, no. Se dijo que habrías de perdonar 70 veces 7. También se habló de las 7 Iglesias de Asia, el libro de los 7 sellos, las 7 trompetas, las 7 copas (de la ira de Dios), 7 pecados capitales, 7 vicios, 7 virtudes, 7 sacramentos, las 7 palabras en la Cruz y lo más de lo más que es el séptimo cielo. Cuando se hizo todo esto, cabe recordar que el séptimo y santificado día, descansó. El 7 pues, era un número mágico, cabalístico, símbolo de lo infinito, etc, etc. Para el cine, que es decir el séptimo arte, entre otras muchas no pasaron desapercibidas las aventuras del agente 007, Blancanieves y los 7 enanitos, 7 novias para 7 hermanos, los 7 magníficos o el séptimo de caballería. Roma tuvo 7 Reyes en sus 7 colinas, mientras que Grecia tuvo a sus 7 sabios. Fueron 7 los años que duró la guerra de los 7 años y 7 los mares que surcaban los bucaneros tal vez por ver la 7 maravillas del mundo. Como no somos nada machistas, reconocemos también que el femenino del siete tiene su cosa, y así da mucho gusto echarse una buena sieta en verano, y resulta peligroso comerse una sieta venenosa. También se alude al ínclito número cuando a un niño se le da a elegir entre varios juguetes y al preguntarle que si quiere alguno, afirma señalando con su morcilloso dedo “si, éte”. Igualmente a la pregunta de ¿te gusta algún marciano de las pelis? la gente suele responder “sí, E.T.” Y en fin, son 7 el número de miembros de un septeto y también el de un octeto triste. El 7 es la maravilla, es Juanito y es Raul. Me tomo un seven-up de esos (con fino) el séptimo día de la semana (de 7 días, claro), mientras escucho las delicias que se pueden hacer con 7 notas musicales; echo mi partidita a las 7…y media y contemplo desde el séptimo piso de mi particular zigurat, los 7 colores del arco iris. Pateo el suelo, me hago un 7 en mis botas de 7 leguas pero ni me afecta, sé que como los gatos, tenemos 7 vidas. ¿Porqué será que la SÉPTIMA promoción de Enfermería es la más……?
Fdo.: 7ª promoción de Enfermería (casualmente, la de quien suscribe este blog)
La Magia del siete
En lo religioso, nadie dijo que habría de perdonar 490 veces, no. Se dijo que habrías de perdonar 70 veces 7. También se habló de las 7 Iglesias de Asia, el libro de los 7 sellos, las 7 trompetas, las 7 copas (de la ira de Dios), 7 pecados capitales, 7 vicios, 7 virtudes, 7 sacramentos, las 7 palabras en la Cruz y lo más de lo más que es el séptimo cielo. Cuando se hizo todo esto, cabe recordar que el séptimo y santificado día, descansó. El 7 pues, era un número mágico, cabalístico, símbolo de lo infinito, etc, etc. Para el cine, que es decir el séptimo arte, entre otras muchas no pasaron desapercibidas las aventuras del agente 007, Blancanieves y los 7 enanitos, 7 novias para 7 hermanos, los 7 magníficos o el séptimo de caballería. Roma tuvo 7 Reyes en sus 7 colinas, mientras que Grecia tuvo a sus 7 sabios. Fueron 7 los años que duró la guerra de los 7 años y 7 los mares que surcaban los bucaneros tal vez por ver la 7 maravillas del mundo. Como no somos nada machistas, reconocemos también que el femenino del siete tiene su cosa, y así da mucho gusto echarse una buena sieta en verano, y resulta peligroso comerse una sieta venenosa. También se alude al ínclito número cuando a un niño se le da a elegir entre varios juguetes y al preguntarle que si quiere alguno, afirma señalando con su morcilloso dedo “si, éte”. Igualmente a la pregunta de ¿te gusta algún marciano de las pelis? la gente suele responder “sí, E.T.” Y en fin, son 7 el número de miembros de un septeto y también el de un octeto triste. El 7 es la maravilla, es Juanito y es Raul. Me tomo un seven-up de esos (con fino) el séptimo día de la semana (de 7 días, claro), mientras escucho las delicias que se pueden hacer con 7 notas musicales; echo mi partidita a las 7…y media y contemplo desde el séptimo piso de mi particular zigurat, los 7 colores del arco iris. Pateo el suelo, me hago un 7 en mis botas de 7 leguas pero ni me afecta, sé que como los gatos, tenemos 7 vidas. ¿Porqué será que la SÉPTIMA promoción de Enfermería es la más……?
Fdo.: 7ª promoción de Enfermería (casualmente, la de quien suscribe este blog)
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